¿Cómo investigamos en la SEFAA?
El estudio de fenómenos aéreos anómalos, comúnmente reportados como «OVNIs» (objetos voladores no identificados) o «FANIs» (fenómenos aéreos no identificados), ha sido históricamente un tema rodeado de especulación y misterio. Sin embargo, en la actualidad el fenómeno puede ser investigado de manera objetiva y rigurosa siguiendo el método científico.
¿Qué es el método científico?
El método científico es un procedimiento sistemático utilizado en la ciencia para adquirir conocimiento. Se basa en la observación, la formulación de hipótesis, la experimentación y la obtención de conclusiones. Su objetivo es garantizar que las investigaciones que se hagan respecto a un tema, sean reproducibles, verificables y libres de sesgos subjetivos.
Las etapas fundamentales del método científico son:
- Observación: Se detecta un fenómeno o problema de interés.
- Pregunta de investigación: Se formula una interrogante basada en la observación.
- Hipótesis: Se plantea una posible explicación a la pregunta planteada.
- Experimentación y análisis: Se recolectan datos, se realizan pruebas y se interpretan los resultados.
- Conclusión: Se determina si la hipótesis es correcta o si es necesario reformularla.
Aplicación del método científico en el estudio de fenómenos aéreos anómalos
La SEFAA aplica estos principios para estudiar los fenómenos aéreos reportados en Chile, lo cual permite descartar explicaciones superficiales y/o sesgadas, y analizar los casos con el mayor rigor posible.
1. Observación y pregunta de investigación
Cada avistamiento de un fenómeno aéreo anómalo comienza con un reporte detallado de testigos, que pueden ser pilotos, controladores de tráfico aéreo o ciudadanos. En esta etapa la SEFAA recopila información clave como:
- Ubicación, fecha y hora del avistamiento.
- Condiciones meteorológicas.
- Características del objeto observado (forma, color, movimiento, velocidad).
- Registros fotográficos o de radar (¡esto es fundamental!).
En cada reporte, la interrogante que intentamos responder es «¿qué tipo de fenómeno estamos observando?».
2. Formulación de hipótesis
Basándonos en la información disponible en un reporte, planteamos una o varias hipótesis, es decir, posibles respuestas a la pregunta de investigación planteada inicialmente. Algunos ejemplos de hipótesis podrían ser:
- Fenómeno meteorológico poco común.
- Reflexiones de luz o ilusiones ópticas.
- Pruebas de aeronaves experimentales.
- Satélites u objetos espaciales reingresando a la atmósfera.
- Fenómeno astronómico.
3. Experimentación y análisis de la evidencia
Luego diseñamos un «experimento» que nos permita verificar o refutar la hipótesis. Para esto, utilizamos diversos tipos de software y técnicas de análisis de imágenes, con lo cual buscamos, entre muchas otras cosas:
- Descartar manipulaciones en las imágenes entregadas por el usuario.
- Verificar información de fecha, hora y lugar del avistamiento reportado.
- Contrastar información con datos de tráfico aéreo.
- Corroborar coincidencias entre el avistamiento y la trayectoria de algún objeto astronómico.
4. Conclusión
Tras el análisis, concluimos la investigación con una respuesta directa al usuario que reportó, más la publicación de un resumen del caso en la sección de casos resueltos de nuestro sitio web. En esta etapa también se clasifica o categoriza el caso según sea el resultado de la investigación.
¿Tienes un avistamiento para reportar? En la sección para reportar casos encontrarás las indicaciones para que tu reporte pueda ser investigado adecuadamente.